Ojos verdes, pelo castaño oscuro (ahora algo arruinado con decoloración), sonrisa linda y facciones delicadas vuelven a Celes hermosa. Consciente de su belleza y con un claro interés por la estética y las tendencias se anoto en la base de datos de una agencia de modelos mandando una foto casera. Y quedo. En esa época recién nos empezábamos a llevar, y al contármelo desbordó una felicidad fresca, de esa que te contagia.
Cuestión que meses después la convocaron para un desfile de “Como quieres que te quiera” y además de la coordinadora del desfile a los gritos, las amenazas para que sonrían y la poca comida que le brindaron Celeste me contó de sus compañeras modelitos.
Según ella todas eran súper huecas, y aunque ella es una de las personas mas exageradas que conozco el pequeño dialogo que transcribo abajo le dio la razón.
Modelito I: Ustedes chicas?, tipo.. Son todas de por acá?
Todas asintieron. Luego preguntaron a que colegios iban, y todos (menos el de mi amiga) terminaban en school. Al no sonarle el nombre del colegio la modelito le pregunto a Cele la zona especifica donde residía, a lo que ella contesto “San Martín”.
Y copadísima la súper M dijo:
“Aaaaay que divino, San Martín de Los Andes!?”
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