29/9/10

Quebracho

Hay noches en las que uno prevee, inconscientemente, fisurar.
Cuando le dijimos a Marce que hacíamos previa en lo de Ale por el cumple y después ibamos a Groove a disfrutar de la barra libre ella dijo "Uh, hoy quiebro".
Arrancó con cerveza -un vaso, dos, tres, cuatro- y siguió con el porro, robando unas pitadas antes de partir al boliche. Una vez adentro la cerveza caía como del cielo.
A las seis y media de la mañana mientras con Luz decidíamos cómo volvernos Marcela desayunaba churros rellenos de dulce de leche que minutos más tarde amenazaría con devolver en medio del colectivo. Tocamos dos veces el timbre porque Marce creía que lanzaba. La gente nos observaba con ojos juzgadores, una parejita nos miraba cómplice y un viejo haciendose el copado comentó "Já, estuvo toda la noche a yogursito. No?.. está bien. Por lo menos se la banca"..

El freak

Me sorprendí al descubrir que en las entradas sobre Luz nunca mencioné a Emilio.
Se conocieron hace ya dos años en un boliche, nada extraño supongo; charlaron, él la chamullo, a ella le gustó y tranzaron. Intercambiaron mails y comenzaron a hablar muy seguido.
Es un pibe raro. Es músico, de onda extraña, un freeky típico de los que suelen atraer a Luz -quien ha llegado a admitir que un muchacho con uñas pintadas le resulta atractivo-. De pelo larguito, camisas cuadrilles y algún aro por el rostro. Grupalmente E, era un candidato que nos caía bien. No se exactamente por qué, nunca me lo pregunté. Pero lo bancabamos, sencillamente eso.
Lamento tener que hablar en pasado, pero el susodicho comenzó a restar fichas -una por una, y seguidas- el día que como primera cita invitó a Luz a pegar carteles por el barrio con una foto de su perra perdida y los datos de la familia.
Mientras él pegaba los carteles con la foto de su can y las palabras "Busco a mi familia" Luz pensaba "Busco pibe normal".

Gossip Girls

Si hay una cualidad que creo tener es no ser vueltera con la preparación para salir. El vestuario y el maquillaje me llevan alrededor de treinta minutos.
Pero cuando estoy en lo de Abigail la previa se extiende con música de fondo bien power, elección de ropa (que implica probarse al menos dos mudas) y un maquillaje que de ser rubor, rimel y brillito pasa a ser una cuasi puerta. Pero me divierte, me siento una chica de Manhattan, bien cool. Somos Serena y Blair -salvando las enormes distancias- por un rato.
Una de esas noches me sumé a su salida con sus amigas. Cumpleaños más Sunset.
Jamás había ido a aquella disco, un vip repleto de gatos, un locutor grasa en el escenario y algunos modelos desfilando con el torso desnudo.
Con Abigail nos reimos mucho, tomamos algunos tragos, sacamos un par de fotos. A diferencia nuestra sus amigas pescaron rápido.
Por nuestros pagos era una noche de plena sequía.