Pero cuando estoy en lo de Abigail la previa se extiende con música de fondo bien power, elección de ropa (que implica probarse al menos dos mudas) y un maquillaje que de ser rubor, rimel y brillito pasa a ser una cuasi puerta. Pero me divierte, me siento una chica de Manhattan, bien cool. Somos Serena y Blair -salvando las enormes distancias- por un rato.
Una de esas noches me sumé a su salida con sus amigas. Cumpleaños más Sunset.
Jamás había ido a aquella disco, un vip repleto de gatos, un locutor grasa en el escenario y algunos modelos desfilando con el torso desnudo.
Con Abigail nos reimos mucho, tomamos algunos tragos, sacamos un par de fotos. A diferencia nuestra sus amigas pescaron rápido.
Por nuestros pagos era una noche de plena sequía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario