Hablando de Roma

Día del amigo.

Después de almorzar en lo de un amigo caminamos con Maga por Ballester hasta la plaza donde nos aguardaban nuestras amigas.

Me transporto mucho con ella, a veces a pata y otras en bondi, y tenemos la teoría de que ahí se dan las mejores charlas.

Mientras caminabamos llegamos a la conclusión de que el modo de sociabilización de Ballester es muy distinto al de San Martín, la gente de Balles está abierta a conocer gente nueva siempre. Uno puede hablar con alguien y pasar un buen rato sin que sea tu amigo y no sentirte un careta. Se ve variedad de gente, podés colgarte charlando con el que es medio negrito, el que es concheto, el que rapea, el que pinta, el que hace break, el que tiene una banda, el amigo de toda la vida, la que era flogger, la que hae fotografía. En cambio la gente de San Martín tiene otros códigos. Distintos, ni mejores ni peores.

Justo terminabamos de hablar de eso cuando llegamos y encontramos como panorama la plaza Alem llena de gente, unos raperos rimando y entre la muchedumbre un rostro conocido con una cara de asco y desprecio increible. Era Celes.